Wall·E (2008)
En un mundo anegado por la basura la humanidad se ve obligada a realizar un viaje espacial de larga duración. Mientras, en la Tierra, los robot Wall·E se encargan de limpiar las montañas de desperdicios y escombros. Finalmente queda un único robot de este modelo, que se pasa el día comprimiendo basura y rescatando pequeñas cosas que cree interesantes. Entre estas cosas se encuentra un cubo de Rubik.
La primera aparición del cubo se presenta en el minuto 00:07:07 después de un día de "trabajo". Cuando lo coloca en la estantería vemos que el cubo tiene una disposión, mientras que en la escena siguiente, sin que aparentemente nada lo toque, tiene otra. ¿Gazapo? A parte de esto, el cubo no tiene los centros en el lugar adecuado, en la cara de arriba vemos que el centro es de color naranja, sin embargo debería ser de color rojo, mientras que el naranja tendría que estar colocado en la cara de abajo.
La siguiente manifestación se hace patente en el minuto 00:25:15. En esta escena EVE, el robot perteneciente a una de las naves del viaje espacial, resuleve en muy poco tiempo (no llega al segundo) el cubo de Rubik que Wall·E le enseña. Es el desenlace que tod@ cuber@ espera al ver un cubo deshecho.
Aparece una última vez, 01:27:03. Su presencia en esta escena es breve. EVE le da el cubo de Rubik a Wall·E, y éste, de acuerdo con la programación con la que se diseño comienza a recoger "basura" (entre la que se encuentra el cubo famoso) haciendo un pequeño esfuerzo la convierte en un cubo prensado de desperdicios. Esta escena puede representar la frustración de mucha gente al intentar resolver un cubo de Rubik por primera vez (o sucesivas veces) y es destino de muchos de estos rompecabezas. Si es vuestro caso: ¡Ánimo! Al final se consigue.
