Peter Parker (Andrew Garfield) es un chico aplicado y solitario, que vive con sus tíos por ser huérfano, tema que suelen dejar al margen.
Cuando el tío Ben (Martin Sheen) entra en la habitación, coge el cubo de Rubik del escritorio de Peter y lo tiene entre las manos mientras habla con su sobrino sobre su padre, y de Curt Connors, el hombre con quien trabajaba el padre antes de morir. Al salir, lo vuelve a dejar en la mesa.
Lo curioso es que, unos segundos después, mientras Peter busca información sobre la desaparición de sus padres, el cubo aparece en el escritorio, pero a su izquierda, sin que parezca haberlo manipulado entre esos dos momentos. Además, aparece resuelto. ¿Gazapo?